Willis Towers Watson respondió a la publicación del pasado mes de mayo sobre IFRS 17 del Consejo de Normas Internacionales de Contabilidad (IASB), en la cual advierte que la implementación será un reto más grande para los aseguradores e inversionistas. De acuerdo con la consultora, el tan esperado IFRS 17 marcará el inicio en una serie de cambios sin precedentes para las prácticas actuales de contabilidad de las aseguradoras, básicamente cambiando cómo y qué tienen que reportar.
Matias Berasategui, director de Risk Consulting & Software para Sudamérica de habla hispana en Willis Towers Watson, señaló: “IFRS 17 es más que ‘sólo’ un cambio de contabilidad y tendrá un gran impacto en las operaciones de las aseguradoras. El estándar actual, IFRS 4, permitió que los enfoques de contabilidad local se usen en cada país, lo que significó que haya poca consistencia a lo largo de distintos países y multinacionales. El gran cambio bajo IFRS 17 traerá más transparencia, pero, sin embargo, llevará algún tiempo para que los inversionistas comprendan la nueva manera de presentar la información”.
Veinte años después de que el predecesor del IASB iniciara el proyecto de contratos de seguros, el nuevo estándar reemplazará IFRS 4 para periodos de contabilidad desde el primero de enero de 2021 y representará un importante logro para la industria de seguros, ya que será el primer estándar mundial de contabilidad para las pólizas de seguros.
“Cuatro años puede parecer mucho tiempo, pero la preparación adecuada para la complejidad de IFRS 17 será un reto”, declaró Matias Berasategui. “El nuevo estándar impactará en resultados, capital y volatilidad, así como también en reservas y procesos de reportes financieros, modelos actuariales, sistemas de TI y, potencialmente, en las remuneraciones de los ejecutivos, por lo que las aseguradoras no deberían subestimar el trabajo requerido para su implementación. La complejidad adicional también afectará la comunicación con los inversionistas”, añadió el especialista.
El análisis hecho por Willis Towers Watson nota que algunos de los mayores retos para las aseguradoras incluyen interpretación y criterio, tratamiento de la volatilidad de los resultados y manejo de expectativas de los accionistas.