Salinas: “En la Argentina pasamos de la nada de la tecnología a toda la tecnología digital en seguros”

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Todo Riesgo dialogó con Carlos Salinas, director ejecutivo de la Cámara Argentina de Reaseguradores.

¿Cuáles son las tendencias del reaseguro internacional?

La tendencia, por ahora, sigue siendo la misma a pesar de que hay siniestros importantes que se ven y son públicos. Pero sigue habiendo mucha capacidad. El problema más que nada va a empezar a generarse con esto del proteccionismo de algunos mercados que hace que la distribución del reaseguro, que por lo general es parte del comercio internacional, empiece a cambiar. Al haber un comercio internacional trabado, también hay coberturas de seguros y de reaseguros que se van a ir frenando o van a quedar localmente en algunos países. Esto es lo que se está viendo, pero capacidad sigue habiendo.

Consecuencia de la guerra comercial.

Consecuencia de la guerra comercial, de estos últimos temas económicos que están en danza, de otros participantes (países que no participaban de este acuerdo), y de algunas reglas que tienen que ver con Solvencia II que hacen capitalizar más las compañías, y ese costo de capital es alto.

¿Qué efecto tiene el comportamiento de la industria de reaseguros internacional en la evolución del mercado de reaseguros local?

La verdad es que, hasta ahora, el reaseguro local está bien porque las compañías que quedaron operando lo hacen con muy buena capacidad y siguen participando, que es lo importante del negocio, cosa que hace un tiempo se decía que por ahí no iban a estar. Siguen participando y mucho, y no tuvieron mayores inconvenientes en la colocación. Además, el negocio continúa repartido, una parte en el mercado local y otra en el internacional.

Se observan cambios en Europa en lo que hace a defensa del consumidor, ¿cómo impactó en el seguro?

El cambio es importante porque tiene que ver con el futuro del comercio del seguro. Esto está relacionado con las reglas generales de protección de datos, que se iniciaron a partir del 25 de mayo en Europa, es muy reciente. La única empresa internacional que se adaptó es Apple, el resto está viendo cómo afecta. Pero es importante porque se trata de una transparencia desconocida, o sea, yo tengo bases de datos de mis consumidores de diferente índole (salud, banco, seguros) y ya no puedo utilizarlas en forma mezclada, sino en forma separada. Y ese efecto provoca que se diferencie después en la venta qué comercializo con mi cliente: o comercializo una cosa o comercializo otra, pero no puedo utilizarlas libremente. Esto va a llevar un tiempo de adaptación, hay grandes empresas que se adaptaron (en el caso del reaseguro, Münchner es una de las empresas adaptadas y ya lo tiene dentro de sus normas).

En cuanto a la transformación digital aplicada a seguros, ¿cuáles son las principales tendencias a nivel mundial?

A nivel mundial por ahí se dieron los pasos que nosotros no dimos. Nosotros pegamos el salto sin dar esos pasos. Pasamos de la nada de la tecnología a toda la tecnología digital y por eso hay un poco de queja, pero a nivel mundial la diferencia es que esta parte de protección de datos más, en el caso del seguro, la obligatoriedad de tener que ser asesorado por un productor de seguros, hace que la tecnología sea básicamente una herramienta pero que no se pierda esto que yo llamo la empatía con el cliente, que no puede tenerla un robot o no puede tenerla una máquina. Hay todavía un espacio para el asesoramiento, ni hablar en grandes riesgos, pero lo hay también en riesgos pequeños, que la tecnología no está reemplazando sino que es un mecanismo de rapidez, de concreción de ventas pero con un avance muy fuerte en todos los rubros.

En países que ya aplicaron la venta digital hace varios años no se observó que los productores hayan perdido altos porcentajes dentro de las ventas.

No sólo no se observa sino que, además, la obligatoriedad y el respeto al consumidor hace que el asesoramiento tenga que estar. Yo puedo cerrar una venta en tres pasos, como se dice ahora, entro, compro y salgo, pero automáticamente la empresa me comunica que tengo que ser asesorado por quien ya es mi asesor o por alguien que la empresa me presente como asesor, entonces yo cumplo no sólo con las leyes de seguros y con la obligatoriedad, sino que además cumplo con las leyes de defensa del consumidor. Esto acá debería solucionarse de la misma forma porque de hecho hay leyes para eso. Por eso yo no le tendría tanto miedo a eso si se cumpliera.

¿Cuál es tu visión acerca de la actualidad del mercado asegurador local?

El mercado seguros, en especial el mercado de caución, ya empieza a ver los inconvenientes que puede haber con el corte de la cadena de pagos. Y creo que el seguro tradicional básicamente va a estar de mantenimiento, salvo que haya innovación o nuevos productos que puedan servir para el momento que estamos pasando. El efecto sobre la obra pública sin duda que lo tiene y creo que esto va a pasar hasta marzo del año que viene por lo menos, cuando habrá una quietud en ese aspecto.

¿Y sobre el reaseguro?

El reaseguro ya vendió. Junio cerró, vendió, ya lo superó. Salvo que haya algún problema de pago, que no creo que haya, hasta junio del año que viene tiene superada su etapa. Se podría ver algo en los grandes facultativos de diciembre, pero son cuentas tan grandes que estimo que no debería haber inconvenientes.