¿Política antiinflacionaria exitosa?

569
ministerio-economia-avance-crisis
Horacio Lachman, director de Todo Riesgo.

La columna de Horacio Lachman

El ajuste avanza a pasos agigantados y sin piedad. Ya está claro que no son sólo reducción de celulares o vuelos de línea. Están terminando con organismos enteros y no hay complejos en detener la obra publica. La licuadora de sueldos y jubilaciones llegó para quedarse: ya está claro que el gobierno va a cristalizar las pérdidas frenando una potencial recuperación de los ingresos. Así se ve en las fórmulas para ajustar pensiones o en las paritarias.

Ni los gobiernos militares se “dieron el lujo” de despreciar tanto los costos sociales. Y la política de reducción del gasto se comenzó a aplicar en un clima recesivo siendo 100% procíclica. Hoy las calles están más llenas de gente que nunca… pero el gigantesco despliegue de fuerzas de seguridad hace posible que en la mayoría de los casos sean las veredas más que las calles.

Política antiinflacionaria

Un ajuste como el que se aplica, que avanza como una aplanadora y logra mantener una buena dosis de apoyo o paciencia de la mayoría de la población, puede funcionar como política antiinflacionaria. Más que el ritmo actual de la inflación (la verdad es que tanto 20% como 15% son igualmente terribles), lo que más se ve es que los dólares libres bajan mucho más rápido de lo que se creía posible.

Ello es un freno, desde las expectativas y los costos, para detener la escalada inflacionaria.
Las empresas en nuestro país no son muy sensibles a la recesión para bajar los precios. La experiencia es que prefieran no vender, antes de hacerlo por debajo del presunto costo de reposición. Nada que ver con los países desarrollados, donde un punto de aumento de la tasa de interés que da expectativas de desaceleración de la economía reduce el aumento de los precios.

Expectativas

Pero con un ancla en el salario real, dólares libres en baja y fuerte reducción del gasto, las empresas van moderando progresivamente su política de precios anticipados. Marzo, posiblemente, vuelva a ser un mes de alta inflación de costos (refutando una vez más la teoría monetarista), pero en abril quizás se reduzca y en el segundo semestre podríamos volver al ritmo… explosivo de la gestión anterior.

El problema es que esta política antiinflacionaria que apunta a la dolarización no deja espacio para las políticas de desarrollo. Cristaliza una economía primario exportadora, no una economía integrada como lo son hoy las grandes potencias.

 

 

Seguinos en las redes:

LinkedIn: https://bit.ly/TodoRiesgoLinkedIn

Twitter: https://bit.ly/TodoRiesgoTwitter

Facebook: https://bit.ly/TodoRiesgoFacebook

YouTube: https://bit.ly/TodoRiesgoYouTube