Uno de los principales íconos de decadencia en la Ciudad de Buenos Aires parece tener fecha de vencimiento con el flamante llamado a licitación de la alicaída Terminal de Omnibus de Retiro.
El pasado viernes se anunció la Licitación Pública Nacional e Internacional para la concesión de la administración y la explotación comercial de la Terminal por un plazo de 35 años.
Entre sus requerimientos licitatorios, el pliego exige un fuerte Plan de Inversiones que deberá ser afrontado por el nuevo concesionario y que comprende un nuevo edificio de nueve pisos. El mismo incluiría hotel, gimnasio, garaje, espacios para locales minoristas y centros culturales para la comunidad lindera.
La actual concesión se encuentra teñida de irregularidades, con su actual concesionario cumpliendo prisión preventiva por dádivas y con una extensión irregular vencida en 2015, que se encuentra actualmente en la justicia contenciosa.
Los seguros de caución se encuentran transitando de punta a punta la emblemática concesión de Retiro: pólizas contractuales, de ejecución de contrato, de pago de canon y judiciales. El resultado es incierto.
Esta nota fue elaborada por Afianzadora Latinoamericana (www.afianzadora.com.ar).