Consejos de CESVI Argentina sobre Sistemas de Retención Infantil

agosto 13, 2021

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El Centro de Experimentación y Seguridad Vial (CESVI) Argentina brindó algunos consejos acerca de la seguridad de los niños dentro del vehículo. ¿Cómo deben ser las butacas? ¿Hasta qué edad deben usarla? ¿Cuál es el Sistema de Retención Infantil (SRI) adecuado y cómo se coloca? A continuación, Todo Riesgo reproduce las respuestas a estos interrogantes que elaboró el Area de Seguridad Vial del centro, que también realizó un informe audiovisual.

Poco uso

Un estudio llevado adelante por CESVI Argentina arrojó como resultado que solo el 24% de los vehículos que circulan con un niño lo hacen con un SRI, mientras que el 76% no lleva butaca u otra silla para niños.

Son cifras que preocupan teniendo en cuenta que mundialmente se reconoce que el uso del SRI reduce en un 70% los riesgos de lesiones graves y fatales en caso de que se produzca un siniestro de tránsito.

Cuándo usarlo

En la Argentina hay algunas diferencias entre lo especificado en la Ley Nacional de Tránsito N° 24.449 y las leyes de los territorios provinciales y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).

Para dar un ejemplo, la ley nacional indica que “los menores de diez (10) años deben viajar sujetos al asiento trasero, con el Sistema de Retención Infantil homologado al efecto, en relación a su peso y tamaño”. No obstante, el Código de Tránsito de CABA describe en la Ley N° 2.148 que “cuando el pasajero sea menor de doce años o con una altura inferior a 1,5 metros, debe utilizar el sistema o dispositivo de retención infantil correspondiente a su peso y/o altura debidamente homologado”.

“Con estas dos simples diferencias que existen al cruzar la avenida General Paz ya estamos muy lejos de poder hacerlas aplicables, más allá del uso y costumbre o la conciencia de aquellos que transportamos a los niños como es debido y de forma segura”, afirmaron desde CESVI Argentina.

Los especialistas añadieron que “hoy, por nuestras leyes, nos guía la edad a la hora de definir usar o no un SRI, aunque los profesionales de la salud y los estudios realizados no sugieren su uso por la edad del niño. Tampoco lo determinan por el peso, aunque es importante aclarar que su diseño y construcción tiene en cuenta como un parámetro el peso del niño para que el SRI tenga la adecuada resistencia en un eventual siniestro”.

A nivel mundial se están volcando las exigencias a la altura del niño ya que una persona de 1,5 metros de altura ya podría utilizar el cinturón de seguridad de tres puntos del vehículo en la plaza trasera. Por otro lado, la estatura no debería superar la altura de la butaca por ningún motivo, como tampoco que deje de utilizar parte del cinturón (arnés) del SRI cuando su tamaño no se lo permite.

Sujeción al automóvil

Las butacas infantiles tienen distintas formas de poder sujetarse al automóvil. La primera, y la más difundida, es la que utiliza el cinturón de seguridad de las plazas traseras del vehículo. Hoy en día, la mayoría de los vehículos cuentan al menos con dos cinturones de tres puntos en las plazas traseras, uno a la derecha y otro a la izquierda contiguo a las puertas.

Existen también dos variantes al anclaje con el cinturón de seguridad. Son las butacas infantiles que poseen el sistema Latch (bajo norma americana) y el sistema Isofix (bajo norma europea). Ambos sistemas de seguridad se amarran a las zonas específicas de la carrocería diseñadas para garantizar la mejor sujeción de la silla al auto. Hasta es posible encontrar que el SRI posea un tercer anclaje, denominado Top Tether, para evitar que la butaca se incline hacia adelante en caso de colisión.

El uso de los sistemas Latch e Isofix garantizan un mejor anclaje del SRI al automóvil dado que son más fáciles de instalar al SRI con el cinturón de seguridad.

Posición de la butaca

Si se adquiere una butaca que solo permite colocarla en el sentido de circulación del automóvil y el niño o la niña es un recién nacido, no sirve. Hasta el año de edad (como mínimo) deben trasladarse en sentido inverso a la marcha.

Esto se debe a que el cuello del bebé no es capaz de soportar el peso de su cabeza. Entonces, colocado en sentido inverso a la marcha y en caso de una frenada brusca, la cabeza es retenida por el propio respaldo de la butaca. Al momento en el que el pediatra nos sugiera el cambio de posición, recién ahí se puede trasladar al bebé en el sentido de marcha.

¿Atrás o adelante?

Una pregunta frecuente que reciben a menudo en las redes sociales de CESVI Argentina es “¿puedo llevar al bebé en su SRI en el asiento del acompañante delantero?”.

La respuesta es no. En la Argentina no es posible trasladar a los niños en las plazas delanteras. Los niños menores a diez años (según la Ley Nacional de Tránsito y Seguridad Vial) deben viajar en las plazas traseras.

Homologación

El SRI debe estar homologado según las normas establecidas de los siguientes entes:

• IRAM 3680-1 y 3680-2 (Argentina), Ley Nacional de Tránsito N° 24.449.

• FMVSS213 (Estados Unidos), Código de Tránsito de CABA (Ley N° 2.148).

• UNECER44/04 (Unión Europea), Ley Nacional de Tránsito N° 24.449

• AS/NZS 1754 (Australia y Nueva Zelanda), Código de Tránsito de CABA.

• INMETRONBR 14.400 (Brasil), Código de Tránsito de CABA.

Elección

Para saber qué nivel de seguridad ofrece la sillita infantil, se puede consultar en el Programa de Evaluación de Sistemas de Retención Infantil (PESRI) para América Latina y el Caribe.

Las pruebas que realiza el organismo muestran qué protección adicional (más allá de las exigencias de las normas básicas de la ONU) ofrecen los SRI bajo condiciones de prueba similares a las de los choques evaluados por Latin NCAP.

Ingresando en https://www.pesri.org/es/ se podrá encontrar el detalle de cada silla infantil, clasificada por año de testeo, grupo, marca, modelo y tipo de instalación con una calificación de cero a cinco estrellas, como reciben los vehículos tras los crash test. Además, podrá encontrarse un detalle de qué protección ofrecen ante impacto frontal, lateral y la seguridad total.