Todo Riesgo TV recibió a Carlos Salinas, director ejecutivo de la Cámara Argentina de Reaseguradores, para realizar un análisis sobre la situación del mercado.
Pagos
“Se podría decir que ahora estamos felices porque podemos pagar. Hacerlo no es un tema menor. Una cosa es no poder pagar nada y otra es, por lo menos, hacerlo en partes o inclusive a tiempo. En el caso de alguna compañía que tuvo la posibilidad de entrar al Mercado Unico Libre de Cambios (MULC), pudo comprar y pagar. Eso ocurrió también desde mediados de marzo hasta acá. Otras compañías lo hicieron con el contado con liquidación y el BOPREAL. Así, las cuentas hacia atrás bajaron mucho”, contó Salinas.
A continuación, el ejecutivo consideró que “esto sucedió por diferentes motivos. Había un número que tenía la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN) y que también lo tenía el mercado, pero como las compañías no tienen una obligatoriedad de informar que realizaron el pago o que negociaron de alguna manera, el número no estaba actualizado y era menos. Yo diría que bajó mucho y puede estar en el 20% de lo que era. Se liquidó mucho y esa es una parte muy positiva”.
Cambios normativos
“Hasta ahora no hubo ninguna modificación que cambiara algo que tuviera que ver con la operatividad relacionada al reaseguro, desde las compañías de seguros hacia el reaseguro. No hubo ningún cambio en eso. Los cambios por resolución, que considero que son positivos, se basaron en la modificación de resoluciones. También se desregularon resoluciones que ya estaban”, aseguró Salinas.
“La SSN, durante todos los años que pasaron, va escribiendo una resolución sobre otra y otra sobre otra. En algún momento hay que destrabar toda esa maraña de resoluciones. Algunas de ellas ni siquiera eran obligatorias, como en el caso de las grúas. Es positivo que se saquen cosas que no tienen por qué estar o que pueden afectar. El mercado pidió y el superintendente los escuchó. Creo que todavía hay mucho más por hacer, que se puede hacer sólo de la mano de la superintendencia sin necesidad de una ley”, consideró el directivo
Siniestralidad
En relación a cómo se imagina que pueden desarrollarse las próximas renovaciones, Salinas comentó que este año estuvo en dos congresos internacionales de reaseguros y de seguros. “Cuando uno mira cómo pegó la siniestralidad y los negocios en otros países, nosotros estamos en un paraíso. A pesar de que nuestro paraíso no es tan bonito como quisiéramos, estamos muy bien. La siniestralidad en la Argentina es muy baja”, destacó.
“Uno podría decir que es suerte, otro podría decir que la economía parece baja en dólares y algunos hablan de una buena suscripción de los riesgos, sobre todo de los riesgos que están por arriba de los contratos de reaseguros tradicionales. Por lo cual, cuando uno mira el mapa de cómo miran los reaseguradores de afuera, la Argentina tiene una excelente siniestralidad y podría considerarse una buena suscripción”, indicó el director ejecutivo de la Cámara Argentina de Reaseguradores.
Próximas renovaciones
Sin embargo, Salinas advirtió que “lo bueno puede no ser totalmente positivo porque del otro lado tenemos una economía que pasó de estar pesificada a estar dolarizada. Ahora, nuestros valores en dólares son bajos y no tenemos tanto volumen. Por ello, no somos interesantes porque no tenemos volumen de negocios en dólares. Por otro lado, Europa, que es nuestro mayor centro de reaseguro, tiene un costo de capital muy alto e inflación. Esa combinación hace que los reaseguradores cuiden más su capital y no lo quieran exponer en zonas que no pagan la tasa del valor del capital. Eso somos en parte nosotros. Casi toda Latinoamérica lo es, pero también en parte nosotros por nuestras devaluaciones”.
“Puede ser que Brasil se esté quedando un poco sin reaseguro en algún sector, pero con una siniestralidad alta. En seguro de crédito, allí hubo un solo siniestro de 500 millones de dólares. No hay número que resuelva esas cosas”, afirmó el ejecutivo.
Mercado local
Salinas sintetizó que “estamos bien, lo veo con optimismo, pero estamos flojos en cantidad de negocios y lo que quieren los reaseguradores de nosotros. De acá a junio habrá que ver”.
“El mercado de las reaseguradoras locales viene evolucionando y creciendo. Las locales, entre pandemia y crisis económica, fueron el primer y mayor respaldo del mercado, mientras que las internacionales bajaron su exposición. Creo que, por ahí, las internacionales se van a sumar un poco más de lo que estaban por estos buenos resultados y habrá que ver qué tan buenos somos para crecer en los negocios”, opinó el directivo.
Tendencias internacionales
¿Cómo se encuentra el mercado internacional de reaseguros? Al respecto, Salinas respondió que “está bien, pero en una situación muy difícil después del siniestro del barco con el puente en Baltimore. Este no tiene todavía un valor puntual de lo que va a costar. Se conocen los valores físicos, pero no se conoce el daño en valores respecto de lo que representa el no tránsito de esa vía navegable y el no tránsito de esa vía terrestre. Los reclamos que van a haber ahí son muy importantes y eso va a impactar muy fuerte”.
“Ese solo siniestro es un impacto gigantesco. Si me preguntás qué puede pasar con un facultativo de transporte, qué puede pasar con un facultativo de aeronavegación, seguro que va a ser caro. Aunque no estemos ahí, tendrá un impacto en las tarifas porque deberán recaudar de algún mercado que funcione y ese somos nosotros”, explicó el director ejecutivo de la Cámara Argentina de Reaseguradores.
Inundaciones en Brasil
Por último, el directivo de la Cámara Argentina de Reaseguradores conversó sobre las inundaciones recientes en el sur de Brasil. “En la zona en que está, que es una zona productiva, no me queda ninguna duda de que es un daño muy grande para el mercado de agro de Brasil. Además, la ciudad de Porto Alegre quedó totalmente inundada, incluso el aeropuerto: hay efectos sobre aviones y hangares. Es monstruoso. Hoy están contabilizando lo que saben que tenían, pero habría que ver qué deja el agua cuando se vaya”, advirtió.
“Creo que es uno de los desastres más grandes de los últimos tiempos. Mucho más grande que lo que nosotros tuvimos cuando se inundó la zona mediterránea. Esperemos que no continúe porque la realidad es que Brasil no tiene seguros obligatorios, con lo cual es posible que mucha gente de esas zonas no esté cubierta. El campo sí lo está, pero todo lo que es vivienda y automóviles es muy probable que no tenga seguro”, señaló.
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