Marsh & McLennan realizó el estudio “Impacto por COVID-19 en Latinoamérica y el Caribe”. Participaron del mismo 534 empresas de once países, entre ellos la Argentina, y 25 sectores. Uno de los principales resultados indica que nueve de cada diez empresas tienen proyectada una disminución de ingresos para este año. Asimismo, el 50% estima un impacto negativo de entre el 15% y 25% comparado con 2019. Sólo el 12% manifestó no haber sufrido un efecto adverso a causa de la pandemia.
El estudio arroja más luz sobre el severo impacto económico que la pandemia tuvo en el tejido empresarial de nuestra región. Para las compañías representó un gran desafío poder mitigar este efecto y lograr reabrir para recuperar sus ingresos. De hecho, el 42% de las empresas encuestadas registró un impacto de entre el 6% y el 15% en su cadena de valor.
Sectores más y menos afectados
Entre las industrias que se vieron más afectadas se encuentran manufactura, servicios, hospitalidad o turismo y comercio (mayorista y minorista). Resulta de vital importancia que estos sectores normalicen sus actividades si se tiene en cuenta que el 67% del PBI de Latinoamérica corresponde a comercios, restaurantes, turismo, transporte, hoteles y servicios sociales y empresariales.
Por otro lado, entre los sectores menos afectados se encuentran los de alimentos y bebidas, comunicaciones y agricultura.
Como parte de la reactivación económica, prosigue el estudio, para las industrias afectadas es de suma importancia tomar en cuenta la decisión sobre cuánta gente regresará a trabajar de forma presencial. En la Argentina, según el estudio “Plan de Retorno Laboral Seguro” elaborado por Mercer Marsh Beneficios, cuando el gobierno finalmente levante la cuarentena obligatoria, sólo el 32% de las empresas iniciará el retorno para las áreas críticas del negocio. En tanto, el 48% permanecerá trabajando de manera remota hasta el retorno total de toda la compañía. Sólo el 13% de las empresas plantea la vuelta total de sus trabajadores.
Escenario desafiante
El panorama 2020-2021 para la región latinoamericana será desafiante. La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) estima un incremento del 10% del desempleo en la región. Esto impactará en el número de personas en situación de pobreza, que podría alcanzar el 35% de la población latinoamericana.
“Esperamos que la economía se empiece a recuperar en 2021, considerando que tomará entre tres y 18 meses, dependiendo de cada industria y situación local. Ante esta realidad, se vuelve crítica la colaboración público-privada para ayudar a empresas de todos los tamaños, y especialmente a las pymes, a retornar/recuperar su actividad económica”. Así lo consideró Gerardo Herrera Perdomo, líder en consultoría de riesgos para Latinoamérica y el Caribe. “También urge que las empresas mejoren sus estrategias de gestión de riesgos, lo que les ayudará a controlar futuros impactos y a construir organizaciones más resilientes”, concluyó.
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